11.18.2020

¿A DÓNDE NOS LLEVAN LOS PENSAMIENTOS?

¿En qué ocupas tu mente diariamente? La mayor parte del tiempo estamos poniendo en marcha al cerebro con nuestros pensamientos: Nos preguntamos ¿Voy bien?, ¿Será suficiente?, ¿Podré hacerlo mejor?.

Los pensamientos llegan de manera consciente e inconsciente. De ellos derivan ideas, creencias y/o recuerdos. Cuando pensamos de manera automática podemos distorsionar la realidad, originando trastornos en casos extremos. Podría decir que generan metástasis en nuestra vida: Si tenemos un pensamiento disfuncional actuaremos en consecuencia. Por lo que es conveniente corregir aquellos pensamientos negativos que no suman y modificarlos a nuestro favor para lograr tener conductas más eficientes. ¡Debemos entrenar la mente!. Como dijo Henry Ford “Tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes, estás en lo cierto”. El cerebro no tiene humor, y todo lo que pase por nuestra cabeza será tenido en cuenta como real.

Cada uno de nuestros pensamientos definen quiénes somos, cómo nos comportamos, encaminan nuestras decisiones, nos llevan al futuro y nos devuelven al pasado y también nos ayudan a comprender la realidad. Buscamos el equilibrio, el crecimiento y el bienestar personal influenciados por motivaciones, el entorno y nuestras percepciones. 

Según un estudio tenemos alrededor de sesenta mil pensamientos diarios y el 47% son desfavorables. Si usáramos el cerebro a nuestro favor, según estadísticas, rendiremos un 31% más que si estamos en modo negativo o estresado. Increíble ¿No? Realmente es eficaz tener una mente positiva y originadora de pensamientos útiles. “Tienes que aprender a elegir tus pensamientos tal como escoges la ropa cada día”. Redireccionan la mirada hacia aquello en lo que nos enfocamos: Nos permiten crecer pero también nos enceguecen afectando nuestro estado emocional y físico.

Con el paso del tiempo, aquello que ocupa lugar en nuestra cabeza se transforma en una creencia la cual marcará un camino por el cual transitaremos y actuaremos. Es conveniente que nuestros pensamientos sean menos rigurosos y más flexibles para que esas creencias no sean completamente determinantes en nuestra vida. “Nuestra cabeza es redonda para permitir al pensamiento cambiar de dirección”. Nos animemos a pensar fuera de la caja de cuándo en cuándo.

En una charla dada por TedX, explicaban sobre la diferencia entre tener un “crítico personal” y tener un “entrenador personal” dentro de nuestra propia cabeza:  El crítico se encarga de decirte todo lo que no puedes hacer: Recordarte los fallos que has tenido a lo largo de tu vida y manifestarte que no eres capaz de lograrlo, en cambio, el entrenador es quien te recuerda lo mucho que has trabajado y el esfuerzo que has dedicado, es decir, se encarga de ver los factores positivos y animarte a hacerlo. ¿Logras ver la diferencia?. 

Pensar es el patrimonio de la humanidad. Nos diferencia de las máquinas al utilizar conceptos y analizar críticamente dando lugar a la inteligencia. El pensamiento es como la levadura, pensando dudamos, y dudando es como emergen nuevas posibilidades: Imaginar, proyectar e inventar un futuro infinito e increíble. “Todo lo que somos es el resultado de lo que hemos pensado; está fundado en nuestros pensamientos y está hecho de nuestros pensamientos” afirmó Buda en una ocasión.

Todo lo que pensamos genera en nosotros un modo de vivir que marcará la manera de actuar en cada situación de la vida, generando resultados favorables o desfavorables dependiendo de nuestro foco. Lo que me lleva a la pregunta ¿Pensamos de manera prudente?. Cómo dijo René Descartes: “Pienso, luego existo”. Les propongo que de ahora en adelante escuchemos a nuestro entrenador personal.

Comencemos a pensar con prudencia, seamos críticos favorables. Pongamos todas las cartas sobre la mesa y no nos limitemos. Todo aquello que pasa por nuestra mente de una u otra manera termina sucediendo. “El que puede cambiar sus pensamientos puede cambiar su destino”.